El que conoce el principio masculino
pero se atiene al principio femenino… es como un cauce que atrae todo el
Universo hacia él.
Siendo
el cauce del Universo… mantiene su integridad, y regresa nuevamente a su
origen.
El que conociendo lo blanco, es fiel a
lo negro… se convierte en la norma del mundo.
Siendo
la norma del mundo… posee la eterna virtud que no vacila, y regresa nuevamente
a lo absoluto.
El que conociendo el honor, permanece
fiel a la humildad… será el valle que reciba en él al Universo.
Siendo
el valle del Universo… posee la eterna virtud que siempre es suficiente, y
regresa nuevamente a la Totalidad.
Esta Totalidad, al dividirse, dará
origen a numerosos recipientes, que en las manos del Sabio, tendrán cada uno su
función. Sin embargo, la función más importante, no requiere discriminación!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario