viernes, 18 de abril de 2014

PALABRAS A MÍ MISMA


            Si soy honesta con mis sentimientos, puedo ser más sensible a los ajenos. Mis sentimientos los registran con mayor fidelidad que mi intelecto.
         Para saber qué ocurre dentro del otro, me pregunto: Qué siento yo que le pasa? En vez de preguntarme, Qué le ocurre?
         Para percibir lo que alguien siente con mayor claridad, dejo de oírle, desatiendo mis pensamientos y buceo en las profundidades de mi alma.
         Si en contacto con mis sentimientos más íntimos le digo Cómo entiendo lo que dice, podrá responderme llanamente si estoy en lo cierto.       

No hay comentarios:

Publicar un comentario